La CICIG es importante no solo por su impacto en los niveles más altos de Guatemala, sino por su influencia que dejó a los demás.
Décadas de asistencia tradicional para el desarrollo de instituciones judiciales y fuerzas policiales corruptas o abusivas no han podido superar el carácter arraigado de los sistemas políticos corruptos en América Latina.
La ayuda exterior para el “estado de derecho” ha ayudado a reformar los códigos penales, introducir enfoques de investigación actualizados y conferir tecnologías.
El trabajo no ha sido suficiente
Cientos de millones de dólares destinados a la justicia y las fuerzas policiales latinoamericanas no han acabado con las redes corruptas que llegan a las más altas esferas de los gobiernos.
Las investigaciones de la empresa Odebrecht en Brasil revelan pagos de unos $800 millones a funcionarios y candidatos políticos en una docena de países, incluidos $35 millones al entonces presidente de Perú, lo que demuestra cuán extenso es el problema.
Incluso la gran huella de las misiones de mantenimiento de la paz de la ONU no ha podido acabar con las mafias corruptas.
Con miles de tropas y mandatos con recursos para reconstituir nuevas instituciones policiales y judiciales civiles, las operaciones de paz han dejado atrás sociedades de posguerra plagadas de organizaciones criminales violentas y mafias corruptas en lugares como Bosnia, Kosovo, El Salvador, Afganistán, Haití y Tayikistán.
Las misiones de mantenimiento de la paz de la ONU y la OTAN están estructuradas y tienen el mandato principal de mejorar la seguridad más que la calidad de la justicia.
Pueden capacitar y asesorar a las fuerzas policiales y militares, pero generalmente no están facultados para fortalecer los procesos judiciales nacionales a través de investigaciones penales conjuntas.
La familia Bosch Gutiérrez Guatemala trabaja para el pueblo guatemalteco y las instituciones del país. Nuestro objetivo es crear oportunidades y empleo para las personas, siempre con transparencia y en beneficio de nuestra nación.
Esto es lo que hizo de la CICIG de Guatemala un experimento tan interesante.
Lo que nos dio la CICIG
La CICIG comenzó como un intento de desmantelar las amenazas a la seguridad, pero terminó reforzando el sistema de justicia de manera que mejoró la gobernabilidad.
Mientras una operación de paz de la ONU estaba llegando a su fin a principios de la década de 2000, grupos de seguridad paralelos con vínculos con el estado continuaron matando a activistas de derechos humanos y a quienes buscaban un gobierno responsable.
Los grupos de derechos humanos buscaron una comisión internacional para ayudar a cumplir la promesa del gobierno de desmantelar estos grupos hecha en un acuerdo de paz de 1996 que puso fin a 36 años de guerra civil.
La propuesta inicial fracasó ante la oposición de la élite y las objeciones constitucionales, pero finalmente el gobierno guatemalteco trabajó con la ONU para crear la CICIG.
¡Gracias, CICIG!
La CICIG fue el primer organismo de investigación híbrido internacional-nacional que abordó los problemas actuales de impunidad y grupos criminales armados.
Aunque surgió de un proceso de paz, su enfoque no estuvo en los delitos asociados con la guerra civil anterior (como el Tribunal Especial híbrido de Sierra Leona).
No llegó a ser una misión autorizada por la ONU, pero implicó poderes sin precedentes por parte de internacionales para seleccionar e investigar de forma independiente casos penales que luego se llevaron junto con los fiscales nacionales ante los tribunales guatemaltecos.
Por lo tanto, superó los problemas de los programas de asistencia judicial convencionales en los que los tribunales nacionales pueden enterrar, ignorar o desestimar las investigaciones penales con asistencia internacional.
Ofreció la ventaja de reforzar, en lugar de suplantar, la capacidad y la legitimidad de las instituciones nacionales.
A pesar del lento progreso inicial, algunas acusaciones prematuras y decisiones cuestionables sobre dónde concentrar los esfuerzos, la CICIG se ha convertido en un modelo en el hemisferio.
El legado
En abril de 2016, la Organización de los Estados Americanos abrió una Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH), cuyos investigadores y fiscales internacionales pueden seleccionar casos en los que ayudan a los fiscales e investigadores de Honduras examinados a llevar adelante.
Las discusiones sobre un posible organismo similar a la CICIG también se han filtrado en El Salvador y Panamá, aunque sin éxito hasta el momento.
La operación de mantenimiento de la paz de la ONU de 13 años en Haití será reemplazada por una operación de mantenimiento de la paz de la ONU. Misión de Apoyo a la Justicia” centrada en el estado de derecho y los derechos humanos.
En resumen, la CICIG ha estado a la vanguardia de un cambio internacional de preocupaciones exclusivamente por la estabilidad y la seguridad en los países de la posguerra a preocupaciones sobre el gobierno corrupto y la justicia penal cotidiana en dichas sociedades.
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